Este invierno, hemos lanzado una nueva y emocionante iniciativa ecológica en el Club de Golf Alcanada para abordar un problema de larga data. La «procesionaria» ha sido problemática en nuestro campo de golf y sus alrededores durante muchos años. No solo los finos pelos de estas pequeñas criaturas causan reacciones alérgicas severas en humanos y animales, sino que las orugas debilitan y dañan los pinos si su población no está controlada. Aunque el gobierno ha implementado varias medidas, los propietarios de terrenos deben tomar acción en sus propiedades.
Tradicionalmente, controlar la propagación de las procesionarias del pino involucraba disparar a sus nidos blancos en los pinos con sal —un método efectivo pero que consume mucho tiempo. Durante más de una década, la mayoría de los campos de golf en Mallorca, incluido el nuestro, han tratado sus pinos cada noviembre con un producto ecológico, Bacillus Thuringiensis, para prevenir la eclosión de las larvas de las orugas. Desafortunadamente, este tratamiento no garantiza una tasa de éxito del 100%, y es imposible alcanzar todos los pinos en nuestra propiedad, especialmente en áreas boscosas más profundas.
Se están desarrollando nuevos métodos, y un tratamiento futuro prometedor involucra inyectar a los pinos con un químico que previene la eclosión de las orugas durante tres años en cada árbol tratado. Realizaremos nuestra primera prueba de este método en Alcanada en 2025.
Desafortunadamente, el problema con la procesionaria del pino ha empeorado en los últimos años debido a inviernos inusualmente cálidos y secos, que favorecen su desarrollo.
En otoño de 2024, contactamos a una ornitóloga local, la Sra. Cristina Fiol de GEAN (Gestión, estudios y actividades de naturaleza), para discutir un nuevo enfoque. En consecuencia, durante el invierno de 2024/2025, se construyeron e instalaron 30 cajas nido por la especialista en el campo y alrededor de la casa club. Estas cajas están diseñadas para atraer a dos especies de aves insectívoras que pueden ser beneficiosas para el control de plagas de insectos: el “carbonero común” y el “papamoscas gris”. Precisamente el carbonero común puede alimentarse de la oruga de la procesionaria del pino. El objetivo de las cajas nido es proporcionar a estas aves un lugar donde reproducirse, ya que necesitan agujeros donde construir su nido. De esta manera se promueve su presencia en la zona como un recurso más para tratar de conseguir unos niveles de infestación que la masa forestal pueda soportar y resulten menos molestos para los usuarios del Club de Golf Alcanada. Debemos tener en cuenta que esa iniciativa por sí sola no soluciona el problema, pero sí que complementa el resto de las medidas que se llevan a cabo, además de ayudar a aumentar la diversidad de aves beneficiosas para los bosques de la zona. Junto con la ornitóloga, identificamos tres áreas cerca de la casa club y en el campo (entre los hoyos 7, 8 y 9) que son fácilmente accesibles para un monitoreo y evaluación regulares del éxito de la iniciativa. Si observamos un número significativo de aves anidando en Alcanada, gradualmente aumentaremos la cantidad de cajas nido alrededor del campo en el futuro.
